J. CAMPOS
LEÓN.— El paro se ceba con la inmigración. La desaceleración económica general, representada en el sector servicios, ha supuesto una dura estocada al colectivo inmigrante. Y la crisis de la construcción parece significar la puntilla. Según datos del Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales, el número de parados extranjeros se ha disparado en la provincia de León al aumentar hasta un 65 por ciento desde el pasado mes de junio. Los servicios públicos de empleo registraban a finales del pasado año como la tasa de paro de Castilla y León entre trabajadores de fuera de nuestras fronteras doblaba a la de los nacionales afectando a una de cada cinco mujeres y al 12 por ciento de los hombres.
Siguiendo la serie de demandantes de empleo, paro registrado, contratos y prestaciones elaboradas por el departamento de Jesús Caldera, la provincia de León ha pasado de los 1.046 desempleados inmigrantes de junio de 2007 a los 1.722 de febrero de 2008. Nueve meses de pleno estancamiento económico que, lejos de finalizar con el cambio de ejercicio, no han hecho sino verse acentuados.
Sectores como el de la construcción han visto como la cifra de parados extranjeros se duplicaba –pasando de 158 a 321 según las estadísticas regulares y oficiales– mientras que el de los servicios ha experimentado aumentos por encima del 50 por ciento –creciendo de los 444 parados de junio a los 675 del pasado febrero–. Tan negativa suma se vería completada con 108 parados más en agricultura, 152 en industria y 466 sin empleo anterior.
El panorama leonés contribuye en parte a que la tasa de desempleo en el colectivo extranjero de la Comunidad doble la registrada entre los nacionales, experimentando una evolución nada positiva, ya que en 2007 se produjo un descenso de más de un punto en los niveles de paro entre los españoles que viven en Castilla y León, mientras que entre los extranjeros esa tasa ha subido más de dos puntos, según informó ICAL.
Un dato es indicativo de la situación: una de cada cinco mujeres inmigrantes de la región está sin trabajo remunerado, frente a una tasa de desempleo femenino entre las nacionales del 9,85 por ciento.
Así se desprende de un estudio elaborado a partir de los datos de la Encuesta de Población Activa de 2007, que publica el Instituto Nacional de Estadística (INE), y que revela que la tasa de paro de los inmigrantes alcanzó a final de ese año un 15,72 por ciento, más del doble de la registrada entre los españoles, que fue del 6,53 por ciento, y de la media de la Comunidad (nacionales y extranjeros), que fue del 7,18 por ciento.
El paro es más acusado entre las mujeres que entre los hombres. Más del 20 por ciento de las inmigrantes se encuentra en situación de desempleo, es decir, 7.275, cifra que contrasta con la media entre las españolas, que es del 9,85 por ciento. Igualmente, en el caso de los hombres, el 12,11 por ciento de los extranjeros está en situación de desempleo, 5.550, frente a la tasa 'nacional' del 4,23 por ciento.
Otro dato a tener en cuenta es la evolución del mercado laboral durante el año pasado, periodo en el que ha vuelto la incertidumbre sobre el paro. Así, mientras que entre los hombres españoles de Castilla y León el paro se redujo en más de medio punto (pasó del 4,87 por ciento en 2006 al 4,23 por ciento en 2007), en el caso de los extranjeros creció punto y medio. Más acusado es este proceso en el caso de las mujeres, ya que si entre las nacionales el desempleo bajó en 2,2 puntos, entre las inmigrantes se produjo una subida de 3,5 puntos durante el año pasado.
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Publicado por Vredondof para INMIGRACION el 3/21/2008 01:55:00 PM