Que los coches híbridos y los que operan a través de biocombustibles son un engaño ya hace rato que lo venimos pregonando en Motorfull. Pero cuando el director de desarrollo del Centro Nacional Francés para la Investigación Científica y catedrático de la Escuela de Administración en Grenoble, Francia, Jean-Jacques Chanaron lo dice con autoridad científica, es mucho más preocupante.
Chanaron ha revelado que en su opinión, las tecnologías híbridas no hacen más que retrasar a los que ya tendrían que haberse adelantado tecnológicamente antes que ninguno: los de célula de combustible. El motivo es el coste tecnológico, financiero y el desgaste de insistir en algo que tendría dudoso beneficio para el medio ambiente, dudosas ganancias para las empresas automotrices y graves daños ecológicos para el planeta.
Lamentablemente el científico francés afirma que, a este ritmo, los coches con célula de combustible no verían masivamente la luz sino hasta dentro de… unos 20 años.
El informe apunta también al evidente "lavado de cerebro" (ergo, manipulación) que se les está haciendo a los consumidores con la cuestión de los biocombustibles, empezando por USA, siguiendo ahora por Europa y Japón con una gran falta (intencional) de información hacia la opinión pública.
A los norteamericanos es relativamente fácil borrarles el cerebro, pero en Europa las cosas cambian y ya se han visto las opiniones de algunas personas con más sentido común. Porque el peor ciego es quién no quiere ver.
Europa aspira a que los agrocombustibles satisfagan algo menos del 6 por ciento de la energía que necesitarán los transportes terrestres en 2010, y un 20 por ciento en 2020. Por su parte, Estados Unidos se propone una producción de 35.000 millones de barriles por año. Para alcanzar esas metas, Europa debería comprometer el 70 por ciento de su superficie cultivable y, en Estados Unidos, la totalidad de las cosechas de maíz y soja tendrían que ser utilizadas para la elaboración de biodiésel o etanol, lo que provocaría una hecatombe alimentaria en el opulento mundo del Norte. MÁS DERROCHE EN EL NORTE, MÁS HAMBRE EN EL SUR
Vamos a alimentar vehículos y desnutrir personas. Hay 800 millones de vehículos automotores en el mundo. El mismo número de personas sobrevive en desnutrición crónica, sostiene el teólogo brasileño Frei Betto. El futuro se llama ahora biocombustible. Así impone el mercado de las multinacionales y así repiten los gobiernos de América del Sur, nacionales y provinciales. A partir de la soja, combustibles. Aunque para semejante demanda sea necesario inventar desiertos donde antes irrumpían pampas sin fin, montes de sombras impenetrables o bosques de vidas multicolores. Biocombustible es la nueva exigencia del dios sediento de sacrificios en el nuevo altar del siglo veintiuno. 800 MILLONES DE VEHÍCULOS, 800 MILLONES DE DESNUTRIDOS
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Publicado por Vredondof para CARBURANTES el 2/12/2008 01:44:00 PM